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Antigua Estación del Ferrocarril de Manizales
Conoce la UAM

Estación del Ferrocarril de Manizales: símbolo de identidad y patrimonio histórico

  Antonia Bernal Duque
Tiempo de lectura ~ 2 minutos

Un edificio cargado de historia se mantiene hoy como símbolo de identidad y patrimonio para Manizales, impulsando la memoria cultural de la ciudad. La histórica Estación del Ferrocarril de Manizales, en la que hoy funciona la Universidad Autónoma de Manizales, construida en los años veinte y testigo de la época dorada de los trenes en Colombia, fue protagonista en el Encuentro Regional de Patrimonio realizado en Ambalema, Tolima, donde se compartieron experiencias sobre la recuperación de antiguas estaciones ferroviarias.

El profesor Fredy Alexander López Arcila representó a la UAM y relató cómo la institución asumió el desafío de rescatar esta joya arquitectónica que, tras décadas de olvido, pudo haber corrido la misma suerte que otros íconos locales desaparecidos.

“Si la Universidad Autónoma de Manizales no hubiera asumido la responsabilidad de proteger y restaurar este inmueble, su destino podría haber sido el mismo que el del antiguo Teatro Olimpia o el viejo Palacio Municipal”, señaló López Arcila durante su intervención.

Profesor Fredy en el Encuentro Regional de Patrimonio.
Profesor Fredy en el Encuentro Regional de Patrimonio en Ambalema.

 

Un ícono de la era del progreso

La estación nació en un momento clave para Manizales, cuando la ciudad era epicentro económico e industrial y buscaba conectarse con las nacientes redes férreas del país y con la navegación por el río Cauca.

La línea férrea hacia Puerto Caldas permitió que en 1924 llegara la primera locomotora, la emblemática La Pichinga, y en 1927 se concluyó la construcción de la estación, reconocida por su estilo arquitectónico historicista y republicano.
Con el declive del transporte ferroviario, el edificio cayó en abandono y estuvo en riesgo de deterioro estructural.

De edificio olvidado a patrimonio protegido

A finales de los años 70, con la creación de la Universidad Autónoma de Manizales, la institución recibió el inmueble bajo la figura de comodato y emprendió un proceso de restauración que devolvió su esplendor.

Gracias a estas gestiones, la estación fue declarada Monumento Nacional en 1984, asegurando su preservación como bien cultural del país.

Hoy sigue siendo un referente de conservación histórica y un espacio vivo para la cultura y la educación.

Un modelo para Colombia

El encuentro, organizado por el área cultural del Banco de la República sede Honda, junto con la Gobernación del Tolima, la Alcaldía de Ambalema, el Ministerio de la Cultura y entidades privadas y sociales, destacó el papel de la UAM como ejemplo de cómo la academia puede liderar la preservación del patrimonio arquitectónico y fortalecer la memoria colectiva.