La UAM sensibiliza sobre consumo de SPA
La Universidad Autónoma de Manizales realizó una jornada de sensibilización sobre el consumo de Sustancias Psicoactivas (SPA), un encuentro pedagógico y reflexivo que buscó abrir conversaciones honestas, sin prejuicios y basadas en evidencia científica alrededor de un tema que impacta directamente el bienestar y la salud mental de la comunidad universitaria.
La actividad fue liderada por el Grupo Gestor de Prevención del Consumo de SPA de la UAM y contó con la participación de profesionales invitados de la Universidad de Caldas, representada por el médico Jorge Hernán Ríos, especialista en Adicciones, y de Mediccol, con la psicóloga Ana María Cárdenas Lozano, quienes compartieron su experiencia en prevención, intervención y acompañamiento a personas con consumo problemático.
Un espacio necesario para hablar de lo que pocos conversan
Desde el Grupo Gestor se destacó que esta jornada surgió como respuesta a una necesidad evidente: abrir un espacio serio y profesional para hablar del consumo de SPA, una problemática presente en la sociedad y particularmente relevante en contextos educativos.
Los organizadores señalaron que en Manizales los indicadores de consumo han venido aumentando, especialmente en población joven, y que persisten tabúes, estigmas y desinformación que dificultan comprender el fenómeno en su totalidad. Por ello, la actividad buscó no solo abordar las sustancias, sino también los factores biopsicosociales, culturales y emocionales que las rodean.
Objetivos centrados en el bienestar universitario
La jornada tuvo como propósito principal iniciar un proceso institucional para hablar del consumo de SPA de manera clara, respetuosa y sin estigmas. Entre los objetivos establecidos estuvieron:
- Resolver dudas y desmitificar creencias.
- Promover la reflexión informada.
- Brindar orientación basada en ciencia, acompañada por expertos.
- Fortalecer la confianza para que estudiantes y docentes se acerquen a los servicios de apoyo.
Aportes desde la experiencia clínica y psicosocial
Durante su intervención, la psicóloga Ana María Cárdenas Lozano recordó que no existe un único signo que indique consumo de sustancias: “Lo que miramos es el patrón: cambios repetidos, sostenidos y que deterioran el funcionamiento. Cambios conductuales, dificultades emocionales, cambios físicos o deterioro académico y social. Aun así, estos signos también pueden presentarse en alguien que no consume ninguna sustancia.”
La profesional enfatizó en acompañar desde la empatía, el diálogo abierto y sin confrontación: “Se trata de dar cuenta de la problemática y acompañar. Si la situación es grave, orientar para que la persona busque ayuda profesional.”
Por su parte, Jorge Hernán Ríos aportó una reflexión clave sobre la importancia del conocimiento como herramienta protectora frente al consumo: “El estudio de las drogodependencias ha demostrado que la ausencia de un conocimiento claro sobre las SPA constituye un factor de riesgo que facilita su uso. Permitir que nuestras instituciones generen actividades que fomenten el conocimiento y la participación activa de los estudiantes facilita la creación de factores protectores cuando deban enfrentar decisiones relacionadas con el consumo.”
Finalmente, enfatizó en el valor formativo y social de estos espacios: “Este tipo de actividades, además de generar conocimiento profesional, permite reflexionar junto a estudiantes y demás participantes sobre la problemática creciente del uso de sustancias en la adolescencia y juventud. Esta reflexión apoyará la toma de decisiones de cada uno cuando enfrente esta realidad.”
Una puesta en escena para transformar miradas
La jornada también contó con la presentación teatral "Chocó Nieves y los 7 viciosos", creada y representada por estudiantes de la Práctica Integral Comunitaria (PIC) de Fisioterapia. La escena, construida por los estudiantes junto a la Unidad de Arte y Cultura—incluyendo guión, representación y producción audiovisual— transmitió, desde el arte y el humor, mensajes claros sobre la importancia de reconocer riesgos y aprender a decir “no”.
La docente Liliana Escobar Serna destacó el impacto pedagógico de este componente: “Fue una actividad muy agradable, con una dinámica que le llega fácilmente a los jóvenes. La creatividad de los estudiantes estuvo presente en cada detalle: desde el guión hasta la canción final. Me parece una participación muy bonita y muy acertada.”
El estudiante Juan Hurtado, de séptimo semestre de Fisioterapia, compartió su experiencia: “Para mí fue muy grato participar en esta obra. ‘Choconieves y los 7 viciositos’ enseña lo que es el consumo de SPA y concientiza sobre los efectos nocivos que puede traer.”
Bienestar y salud mental: una apuesta institucional
Desde la Unidad de Vida Universitaria, Mariana López Cardona, practicante de Trabajo Social, destacó que estos espacios abren conversaciones necesarias, promueven la prevención temprana y fortalecen el autocuidado: “Al ofrecer un espacio libre de estigmas, se facilita que más personas identifiquen riesgos y busquen apoyo a tiempo. Eso contribuye a un campus más seguro, consciente y empático.”
¿Dónde pueden buscar apoyo los estudiantes?
La UAM ofrece diversas rutas de acompañamiento gratuito, confidencial y especializado:
- Vicerrectoría de Desarrollo Humano y Bienestar: apoyo psicológico y social.
- Grupo Gestor de Prevención del Consumo de SPA.
- ZOU – Zona de Orientación Universitaria: un espacio diseñado para hablar sin tabúes.
- Línea de Salud Mental UAM: disponible en la web institucional o a través de Servicio Médico.
El mensaje final de la jornada fue contundente: hablar del consumo de SPA es un acto de cuidado, y la UAM seguirá fortaleciendo estrategias para acompañar a su comunidad con responsabilidad, empatía y evidencia científica.